Es tan fácil decir tristeza cuando está lloviendo. Dejarse de cosas y llegar al punto. No se. Las cosas seguirán siempre siendo.
Te quiero mucho. Pero no me gusta jugar tan solo. “Porque no”, no es una respuesta. Sobre todo en nosotros que nada es determinante más que nos queremos. Ahora que llegas con todo eso que no era. También son otras cosas. En tu llegar hay un a donde. Y ahí estoy yo. Y eso a mí me toca.
Digo. Porqué tiene que ser así. Al menos que así lo sea. ¿Que el amor es eso? Y ni lo que fue por siempre lo podrá cambiar. Así que si te beso y tu te dejas. Tus palabras que razonan serán sordas. Mis oídos que se endiablan explotarán. Pero sigue así. Tu “no” me traerá siempre de un ala.
Buenas noches.
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