Se acerca el día de muertos y Halloween, la guerra cultural está fuerte. Los que prefieren vender se van por halloween y los más románticos, tradicionalistas o culturales se van por lo “nuestro”: día de muertos. Yo la verdad estoy confundido. Yo ya no se que es más nuestro. Para estos momentos de la historia, el presente, Sam está más cerca de mí que cualquier otro de los tíos que tengo. Blanca Nieves, Nemo, la Sirenita, son las piñatas de ahora. Pero a mí eso no me importa. Por mí quememos todas las banderas e icemos la del amor. Total, todos estamos en la Tierra.
Me gusta que la Mariana me abrace por las mañanas. Y jugar almohadazos con ella. Ahora que me vaya voy a extrañar eso. Ya me quiero ir. Me hace falta una base fija. No la he tenido desde que llegué a Culiacán. Eso ha sido detonante de casi todo lo que me está pasando. Le doy gracias a Dios pero tengo que atrapar ya esto en un solo espacio. Espero y no pase de esta semana. Y que la Mariana me valla a visitar a mí. Eso va a ser muy bueno.
Extraño mucho a la gente de Vallarta. Y a la Lups. Quiero estar con Tanya. Ir al mar. Y comer espagueti con salmón. Y ensalada. Y todas las cosas que le pone a la vida Tanya. Ya quiero conocer al nuevo hijo de Liz, ya imagino a esa cabrona, le han de brillar los chinos de fuerza.
El Teojaris trae algo ahí con mucha intensidad. Verónica viene la semana que entra, es lo único azul en el rojo. Llegó el kenyú y regresó el Takechi. Todo está otra vez corriendo. Las de b.you están muy encandiladas, prefieren piratearse una imagen que crear la suya propia. Quieren güeras en sus espectaculares. No se sienten lo que son. Viven en lo que quisieran ser y casi estoy seguro que jamás lo serán. Me gusta verte los calzones.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario