viernes, octubre 31, 2003

251 Mono auto existente día 14 luna 4

11 am
Estoy en la oficina buscando por mi mente, pendientes. Dormí con la Mariana. Agarrados de la mano toda la noche. Ella es un trompo, a veces tenía sus pies sobre mi cara. Pero está bien, no hay amor más puro. He dejado varios días sin escribir. Entre todas las cosas de la fiesta de disfraces, el depa y unas fotos, he andado muy ocupado. Ni a las bicicletas he podido ir. Anteayer fui a la casa de Lizette y fue muy bonito todo.

Hoy en la noche llega Verónica. La mala comunicación con el Kuwa me adelantó las cosas. Andan tan ensimismados que no saben que hacer, una pinche fiestilla los trae locos. Y no es que los haga menos, pero no es para tanto. Y me cambió esta noche. Por lo menos lo que tenía planeado hacer. Pero por algo suceden las cosas.

Hoy me entregan mi depa. Por fin. Es amplio y en la calle principal de la ciudad. Tiene un muy buen balcón y una terraza muy grande con un cuarto en el techo. Ahí vamos a hacer un taller y un lugar para hacer una buena fiesta. Estoy contento. Lo vamos a pintar de blanco, por lo menos el área común. Yo quiero un rosa mexicano para la cocina y todavía no se como quiero mi cuarto. Tal vez convine el café y el lila en tonos claros. Quiero un edredón de plumas blanco. La oficina es posible que la ponga rosa con azul. No se. Me falta pensar bien en eso. Arriba quiero llenar de plantas. Me gustaría que en unos años el edificio esté envuelto de una enredadera entero. Y que la gente diga, el edificio que es un árbol.

En la oficina las cosas bajaron de tono. Decidí ya no leer al Mario. Desde que le dio por Dios quiere reevanjelizar al planeta. Y a mí eso me trae pensamientos y prefiero decirme “que te importa”. Pero más bien creo que es un pedo de ego, o celos o algo así. Me sentí excluido de ocurre. Y hay cosas que no quiero sentir. Y además es verdad, no comparto muchas de sus formas. Me reflejo tantas cosas en ellos que no quiero. No me siento un ser superior ni más puro o avanzado. Como ellos. Pero si quisiera aprender de lo que están haciendo. Y me duele que no me incluyan en sus proyectos. Pero ni modo. Mi fuerza es otra.

A veces me viene a la mente la sensación de que estoy fingiendo. Llega porque pienso que todos están haciendo cosas para calarme. Que las cosas buenas que hacen por mí en la oficina lo hacen para ver hasta donde llego. Como si supieran que yo estoy planeando algo. O aprovechándome de todos. Creo que sufro de paranoia. Que hasta me lo creo.

1 pm
Ahora lo que más quiero es que esta niña me llame. Para tomar un café o lo que sea. Y que me diga todas sus razones. Y todas esas cosas que me hacen caer en cuenta. Y así quererla más. Así como ella quiere. Pero ella no quiere ser parte de estos días y eso ya es para mí una gran razón. Y entiendo. Y la respeto.

7pm
Me llamó y fuimos a dar unas vueltas. Y nos besamos en el departamento. Vacío. Hablamos y nos tomamos de las manos sudando cada quien las suyas. Platicamos cosas de ayer y el rol del día. Me gusta mucho lo que siento. Estaba seguro de que no me iba a llamar. De hecho, quería preguntarle, cuanto tiempo le costo hacerlo. En media hora voy por verónica al aeropuerto.

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